miércoles, 6 de agosto de 2008

¿Es procedente decir a los cuatro vientos que he dejado de fumar?

-Puede ser útil como apoyo para evitar recaídas
-Puede conseguir que nuestro entorno nos fulmine a preguntas todos los días y esto nos lleve a fumar, al suicidio o al asesinato colectivo.

24 comentarios:

Berto dijo...

A mí me ayudó, pero más que por el compromiso que se adquiere por la rabia que me dio ver que nadie me creía.
De todas formas tengo la impresión que el compromiso de palabra y la preocupación por la imagen que uno proyecta ya no son valores en alza.
Así que si alguien te hace notar que estás fumando cuando te habías comprometido a no hacerlo puedes decirle que no lo habías firmado, o que vives en un pais libre y que has ejercido la libertad de cambiar de opinión, o en tono informal: me la suda.
Quizá en otra época fue útil, quizá sólo sea una buena idea para aquellos que fuimos educados en el Cretácico.

Anónimo dijo...

Yo soy de la opinión de no hacerlo, es más....yo no lo hice, sólo se lo dije a mi pareja y porq vivo con él, el resto de gente se enteró de mi decisión cuando cumplí el mes sin humos, hablo de amigos, amigas, familiares, etc...

No sé, no me gusta q me estén preguntando cada dos por tres cómo lo llevo, ni q me repitan si he vuelto a caer...

Incluso hay una pregunta q me hizo alguien cuando le conté q lo estaba dejando, q no entenderé nunca: ¿y por q lo dejas?...

Yo creía q la pregunta estaba en porq se fuma...

Por cierto..sigo sin poder registrarme, ya he cambiado incluso mi contraseña, pero nada...

Anónimo dijo...

En primer lugar, Berto, no te hagas el anciano, que yo enseñe a hacer barcas a Noé, y no me veo tan viejo.

Nuevamente te olvidas, Berto, de tu amiga del abrigo de zorra. Quien enterada de tu hazaña, poco le faltará para venir corriendo con su mejor amiga íntima y decirte:

– ¿Pero no lo habías dejadooo, quiriiiido? ¿Ves, menganita, como te había dicho yo que fulanito era incapaz de dejar nada…? ¡Ay! Con la alegría que nos habías dado, que pensábamos que ya no te ibas a morir tísico. Pero, como siempre he dicho: a pesar de lo que te queremos y admiramos, nunca has tenido mucha fuerza de voluntad para acometer problemas.

Y quieras que no, para evitar tener que degollarla en la vía pública, te refrenas y no fumas.

La Taberna Fantasma dijo...

Yo lo dije, pero tampoco lo anuncié como el santo advenimiento. Se lo dije a mis compañeras de trabajo para que no se extrañasen si no salía a la calle a fumar con ellas. A mi santo, que sin mayor instrucción recogió todos los adminículos de fumador de la casa y aún hoy no sé dónde están. Pero no se lo dije a nadie de quien no esperase complicidad y apoyo constructivo. La primera vez lo anuncié como el notición del año, esperando que la presión externa me ayudase a mantenerme, pero lo cierto es que la sensación de expectativa sólo me generó ansiedad y sabor a fracaso cuando recaí. Así que esta vez no pedí nada a nadie. Pensé que el mundo no iba a pararse porque yo dejase de fumar, que me seguirían ofreciendo tabaco y yo tendría que aprender a decir no. Me molestaban mucho más los comentarios de amigas bienintencionadas que me recibían con los brazos de par en par en su correcto universo de color (de color pastel, claro), o sea, mis particulares Susanitas. Esta vez no se lo he dicho. Al cabo del tiempo se han ido dando cuenta de que no fumo y punto.

Anónimo dijo...

Yo aún no he decidido qué hacer a ese respecto. Las otras veces lo hice público y creo que no me ayudó en absoluto. Yo fumo mucho y todo el que me rodea se da cuenta. Cuando dije que lo dejaba todo el mundo se consideró un experto en la materia y se permitió darme todo tipo de rocambolescos consejos. Que guardase un cigarro en casa, que siguiera fumando un sólo cigarrillo por la noche, que a su prima le fue genial la acupuntura y que fulanito fue a Fátima. De repente además de fumador pasé a ser idiota y a tener que soportar sus compasivas miradas. Sentía la necesidad de hablar del tema siquiera por escucharme yo mismo, pero no tenía interlocutores. Con unos no porque no era posible que me entendieran y con los otros porque la paciencia tiene un límite que conviene no agotar. Por eso esta idea de un grupo de terapia on line me parece tan sugestiva.

Gabriela dijo...

Yo mitad para acá, mitad para allá y algunos al costadito.
A los más cercanos les conté porque esperaba darles una alegría y recibir su apoyo aunque nunca jorobaron mucho con eso. No lo suficiente teniendo en cuenta que los tuve una vida sometidos a mi humo, al olor del tabaco, y etc. A mis hijos, digo, a mis amigos más íntimos y queridos, y a un novio que a veces tengo y a veces no.

También avisé en los espacios donde trabajo por aquello de los ataques de ira y la locura de las primeras semanas. La mayoría de mis compañeros de trabajo, aún los pocos fumadores que van quedando me alientan. A los amigos que viven lejos y siempre me han pedido que lo deje, o han dejado antes que yo, les copy paste los números del quitómetro y se los paso por correo cuando cumplo semanas o meses, y ellos se alegran y me escriben palabras de aliento.
Por último, fui contando públicamente para recibir aplausos de gente buena y a otras personas clave, a las peores de malintencionadas, con ese preciso criterio que describe Auriga. Para cuando me asaltan ganitas, si perduran, pensar "¡NO FUMO NI LOCA NI ATADA!MIRÁ SI VOY A DARLE EL GUSTO A ESA PERRRRRRA DE VERME HOCIQUEAR ANTE ELLA. ASI NOMAS: NO FUMO." (no tardarán nada en descubrir que porsupuesto que esta es mi suegra, chicas).
En general me ha ido bien. Algunos me han propinado hasta halagos con insulto incluido del tipo "si alguien como vos es capaz de dejar, se ve que se puede nomás..." ¿Cómo alguien como yo? ¿Qué soy yo? ¿Un despojo?
Por último, les cuento algo curioso sobre la mirada que proyectamos y lo que podemos disparar en los demás. Supe anoche mismo que uno de mis hermanos, mi propia ssssangre de mi ssssangre, anduvo averiguando si es que realmente no me fumo unos puchitos a escondidas de vez en cuando. Caramba, no se si me dolió o qué porque tiendo a reírme de él que es supercompetitivo conmigo, una historia vieja. Pero la verdad es que primero me dio risa y después me dieron ganas de meterle una piña, y después me dije "Pobre: soy para él otra vez un mal espejo en el que mirarse porque siempre hago lo que me da la puta gana y porque sigue fumando y no le gusta."
De todo, como verán. Hasta alguien parecido al de tu desconcierto, Lanena. Una mujer de quien intuitivamente esperaba un "hurra", me miró fijo a los ojos y me dijo "Y bue....Si vos vas a estar contenta...." ¿No es genial? No pudo alegrarse, pero tampoco tirarme la peor.
Bien, quería contarles esto porque creo que aunque no sea lo vital en la decisión y que vamos a fumar o no fumar con ellos o a pesar de ellos, es importante más que tener en cuenta y disfrutar del apoyo de los buenos, estar en guardia para cuando aparece gente como la zorra o el llamado impresentable, y tá. Pulsearlos, ganarles, contarlo y desahogarse. Pero jamás destrozarlos de esa manera, y mucho menos como se ha dicho ya hasta el hartazgo, cargarlos con la responsabilidad de flaquear.
A veces lo miro así: la misma persona que me tienta a fumar de alguna manera, recibiría con cierta envidia y desagrado que mi vida profesional pegase un gran salto económico, por decir algo. Y trataría de ponerme piedritas en el camino no se si para que fracase, pero al menos para que no lo disfrute tanto. Del mismo modo que los verdaderos amigos se alegrarían con uno y redoblarían apuestas con fichas de nácar, y otros pobres, ni fu ni fa. Hay gente pa todo en todos los ámbitos. Y vivimos con ellos para lo bueno y lo malo. Tampoco es que el mundo se detuvo, ni que se ha dividido en los buenos y los malos porque nosotros decidimos dejar de tragar humo como unos tontos...
Me fui un poco al carajo con la extensión. Pero es que se me van viniendo otras reacciones a la memoria, y hay de todo pero ¡de todo! Para un tratado, casi. Pero ahora los dejo en paz.
LTF....¿retomamos el curso de escritura sintética?

La Taberna Fantasma dijo...

Fénix, ya tienes la fecha puesta con las demás. (Te vigilo, chico). Gabi, si te das a la escritura sintética dejo de leerte. ;D

La verdad, yo creo que la mayoría de la gente que mete la pata en estos casos es bienintencionada de verdad, pero eso no obsta para que yo lleve mal el escucharla. Me cansa tener que argumentar constantemente que esto no es un vicio, es una adicción, que no he abandonado un mal hábito sino que me recupero de una enfermedad y la prima de Fénix que no, que es psicológico, que zetanito lo dejó de un día para otro, que cómo va a ser eso de que dejar de fumar te puede detonar una depresión...? Anda ya mujer, vaya tontería... Tú lo que tienes que hacer es mimarte y dedicarte tiempo (=cualquier autocuidado de belleza que se le venga a la mente, como por ejemplo hacerse la manicura, apuntarse a pilates, o untarse de ungüentos hidratantas y aceites aromáticos, como si la autoestima de una mujer fuese por definición un eterno spa). Y yo sí sí sí, qué razón tienes jamía, bueno, te dejo, reina, que no llego a la pelu.
Evidentemente, hay gente querida y cercana que me apoyó de forma muy constructiva y también gente a la que no había visto nunca (loor a la Orden de la Boca Grande). Pero a mí me irrita mucho la confusión entre opinión e información (y también entre idea y ocurrencia) así que mejor no dar pie.

La Taberna Fantasma dijo...

Vaya pedazo de rollo sin sentido que os acabo de largar sin venir a cuento...

Anónimo dijo...

a) Querida Taberna, ni era rollo, ni carecía de sentido. Se ha entendido perfectamente tu exposición.

Qué diferencia cuando te da por los círculos concéntricos.

Gabriela dijo...

Auriga, pero si es clarísimo cuando la señorita Admin se toma la infusión y cuando no ¿no?.

Latabér, cuando vuelvas de la pelu, ¿me explicarías qué color te hiciste y la distancia que se te plantea entre idea y ocurrencia? porque yo estuve todo este rato en la tina con burbujas de almendras dedicándome mucho tiempo a mí, y no he encontrado las siete diferencias.

Anónimo dijo...

Taberna, venía muy a cuento. Exactamente eso es lo que yo sentía en situaciones similares con la diferencia de que a mí me habrían invitado a jugar el partidillo de los sábados en lugar de al spa. (Idea u ocurrencia? Jajajaja, esta me la apunto con tu permiso!)

La Taberna Fantasma dijo...

A ver, para mí una idea es una elaboración intelectual fundada. Puede ser más compleja o más sencilla, puede compartirse o no, pero tiene un sustento lógico que la antecede. Por el contrario una ocurrencia es un pensamiento que sobreviene, acaece u ocurre (de ahí), sin que necesariamente tenga que fundarse en nada más que en la libertad de pensamiento y expresión de cada uno. Ejemplos:

LTF: Estoy dejando de fumar con la ayuda del medicamento X.

Idea: Espero que lo estés tomando con control médico, ya que ese medicamento contiene un potente ansiolítico cuyo potencial efecto adictivo debe ser controlado por un profesional.
LTF: Sí, me lo ha recetado mi médico.

Ocurrencia: Anda ya, ¿pa qué? Eso no puede ser bueno. Eso es cuestión de que tú digas ya no fumo y se terminó el problema. Mi amiga Pepi un día dijo hasta aquí, y ya lleva 25 años.
LTF: Pofueno, pofale.

Y entre una y otra, matices, claro.

Lo de la pelu era para librarme de Susanita, pero cuando vaya me lo teñiré como siempre, de colorao como la Lalola (la española, que la otra es rubia) con salpicón de mechones dorados, en plan llama o bosque de hayedos otoñales (qué bo-ti-to). ¿Viste la histérica que gritaba en la entrada de Max mon Amour? Esa soy yo.

Gabriela dijo...

El mundo definitivamente está lleno de gente ocurrente, nomás.

(Preciosa descripción de tu color. Ahora cuando mire TVE voy a estar más atenta a las pelirrojas que gritan Mex mon amour o alguna otra cosa para decirles a todos acá que tengo una amiga allá en madre patria que es famosísima y tiene la autoestima por las nubes porque ya no fuma)

Anónimo dijo...

Que se lo digas o no a las susanitas da igual. Ellas no tienen problemas con esas cosas. Se enterarán a través de una amiga íntima de la portera de una vecina de una amiga tuya que se dio cuenta de que no fumabas. Y entonces volará en pos de ti para sonsacarte. ¿De verdad no te apetece fumar? ¿Nada, nada? ¿Ni un poquito? ¿Sí?, ¿te apetece? Lo sabía. Pues no puedes porque si fumas te morirás de cánceres. Y se sentirá feliz sabiendo que con sus consejos te ha salvado de una epidemia y ella ha hecho la buena acción del día.

Así son ellas.

Arrancar a las susanitas los pelos a puñaos está penado por ley como muy bien sabes. Además es más fiable llevarlas de compras al cortinglés y en cualquier semáforo tirarlas a las ruedas de un camión. ¡Ay, qué torpe soy! -dirás compungida...

Por cierto, quisiera teñirme las canas de púrpura imperial. ¿Qué sugerís?

Berto dijo...

Me encanta lo de la autoestima como un eterno spa, supongo que es uno de los alicientes de pertenecer al bello sexo.
Querida mía, te imagino en una piscina con fondo de mosaico y una blanca nube de doncellas haciéndote las uñas, la fogosa cabellera, ofreciéndote ahora sombras de ojos, luego esmaltes de uñas y vestidos de vaporosas muselinas de seda.
Los hombres para fumar sólo tenemos que ponerle un par de cojones.

Berto dijo...

Si que es molesto eso de enterarte que has sido tema de conversación por haber dejado de fumar, cuando viene fulanita y te dice como la gran cosa que todo el mundo pensó que serías incapaz, además en mi caso estos amigos me han visto dejar de beber y les ha parecido estupendo. ¿La diferencia? es que ellos no son alcohólicos y si son fumadores. Lo curioso es que a la que me decía esto la noté interesada en cómo lo había hecho y yo le conté sobre esto de la terapia de grupo y otras cosas y de repente me espetó que estaba muy bien saberlo pero que ella era muy feliz fumando y que no lo dejaría jamás porque le encantaba. Entonces le conté que mi amigo Auriga pensaba teñirse las canas de rojo imperial y que yo era decididamente partidario del azul Prusia.
No todo el mundo es así, claro está, otros dos amigos me dijeron que yo hacía que pareciera fácil dejarlo, que debía de tener mucha fuerza de voluntad y les contesté que lo que tenía era mucha más información, que no tengo ninguna propiedad psicológica que me haga superar las adicciones y que todo empieza diagnosticandote a tí mismo como profundamente enfermo de algo y con unas ganas desesperadas de recuperarte.
Una de estas personas ha dejado de fumar y la otra va a hacerlo en breve. Esto me aporta mucho más que los comentarios mezquinos y de paso sea dicho me hace sentir más comprometido a la hora de no fumar, mucho más que haberlo anunciado públicamente.

Anónimo dijo...

Púrpura: rojo subido que tira a violado. (DRAE)
No empecemos con los cambios ¿eh? Dije púrpura imperial, no rojo imperial. Que no es lo mismo, que lo del violado tiene mucha enjundia.
Porque tira a violado, no sé si me entiendes. Te pueden tirar y sin embargo no violarte, pero en este caso sí, en este caso es con todas las consecuencias. Te tiran y te violan. Y claro, te quedas de rojo subido, tú sabrás por qué...Bertito, tú sabrás por qué... Pero no me fumes.

Beatriz dijo...

Tirar...violar..., a dónde iremos a parar?, ya está bien, q tampoco es para desmadrarse así por dejar de fumar!! leñe!!!.

Lanya dijo...

Bueeeeeeenas :)
No, no os habeis librado de mi, ya os lo avisé, que de mi no os librabais, pero podeis respirar tranquilos (por un tiempecito), aun no vuelvo del todo (grrrr&&%GRR##$@%R$@##@@@&HGRRÇÇ)

Pues yo, la vez anterior que intenté dejarlo, lo anuncié a bombo y platillo, pensando que eso me ayudaría, o más bien que mi orgullo me impediría volver y tener que reconocer públicamente mi fracaso...... finalmente confirmé que tengo muy poquita fuerza de voluntad y descubrí que aun tengo menos orgullo :|
El poquito orgullo que tuve me sirvió para que durante una temporadita en el trabajo simulaba no fumar, pero lo hacía escondida en el baño :( (sip, vergonzoso, lo se)
Esta vez se lo dije a mi marido y a mi peque, punto final, a nadie más. A la semana lo tuve que confesar a un compañero de trabajo, porque él no fuma y se emperró en que fuéramos a tomar café al habitáculo para fumadores.
Al mes mi madre empezó a sospechar, lo que tiene narices porque como en su casa todos los fines de semana......

Lo que peor llevo de que el personal sepa que has dejado de fumar es que lo utilizan para ningunearte y culparte de todo, usando la famosa frase
"desde luego, hija, desde que has dejado de fumar no se puede hablar contigo"
en cuanto les llevas la contraria en algo, o variantes de la misma frase... la imagiación humana es casi ilimitada, sobretodo cuando se usa para jorobar al vecino.

Ah! por cierto... sigo fiel a mi promesa, no he fumado, ni he asesinado a nadie ;)

Auri, por Dios, tirado y violado por ahí por tapar una canitas... casi mejor echalas al aire a ver qué pasa ¿no?

berto... ¿educado en el cretácico? amos anda!!!!!!!! ¿no habíamos quedado en que eras uno de nuestros buenos mozos?

Si es que desaparezco (como el Guadiana) y os desmandais.

Berto dijo...

Hay algo en lo que nuestro amigo violado si tiene razón todo lo que huela a excusa o explicación a la hora de encender un cigarrillo es una mentira peligrosa. Y esto no lo digo como una ocurrencia, es una idea que no es mía y en la que creo porque me ha facilitado entre otras cosas dejar de beber. Siempre que encuentro que hay una posible explicación para mi necesidad de fumar intento pensar que mi cerebro de adicto está construyendo una cortina de humo.
La gente no fumadora cuando tiene problemas en el trabajo no fuma, tampoco lo hace cuando se separa de su pareja ni para celebrar el nacimiento del Anticristo. La gente no fumadora simple y llanamente no fuma nunca, el resto son ideas de adicto.
A ver qué le dirías a tu hijo si llegara del colegio diciéndote que está muy nervioso porque su dislexia le ha hecho equivocarse y los niños se han reído y esto ha provocado una pelea horrible, que sólo puede salir de este estado de estrés y angustia si le pones un pico de heroina debajo de la lengua, para que no se lo note la seño.

Berto dijo...

Me he equivocado. Esta entrada era contestación al escarnio que le montó Auriga a Fénix en el hilo del impresentable.

La Taberna Fantasma dijo...

Realmente una de las cosas que me han molestado de que los demás lo sepan es que hay gente que pretende usarlo para manipularte... "Tabi, dices eso porque has dejado de fumar, pero yo sé que tú en realidad lo que quieres decir es lo contrario, y si no estuvieras en este estado alterado tuyo lo verías claro y estarías de acuerdo conmigo" Vamos, que el síndrome de abstinencia te incapacita para opinar ni hablar ni nada. Aunque yo creo que las chaladuras de los miembros de esta pequeña comunidad terapéutica virtual ya venían de antes, no son efecto del mono...

Una cosa que creo que puede ser buena y a mí me sirvió la primera vez es nombrar un tutor al que darle el coñazo. Tiene que ser un o una intimíssima que, a ser posible, no fume o haya dejado de fumar y cuando te dé el yuyu la llamas y le lloras un rato pa que te contenga. Yo al mío nunca lo llamé así escandalosamente, pero le reportaba y me sentía segura. Más o menos como lo que hacemos aquí pero por teléfono o in person...

Anónimo dijo...

Al niño lo que se le dice en estos casos; bueno, y en cualquier otro, es: Cuéntaselo a tu madre que yo ando muy ocupado.
El niño va y se lo cuenta a la madre. Y la madre le pregunta: ¿se lo has dicho a tu padre? Y el niño dice que sí y que le ha dicho que se lo cuente a ella. La madre ve la ocasión que ni peripintada, se desmelena y grita aquello de: Toooooodo lo tengo que hacer yo en esta casa, parezco la criada de todos. Qué la criada, la esclavaaaaaaaa. Y se larga a la pelu.
Y el niño desesperado se pone a jugar con la playstation.

Pues yo en el trabajo no se lo dije a nadie, pero aquellos con los que salía a fumar al patio se han dado cuenta. Y ahora cuando los veo salir les miro con una sonrisa sardónica, jis, jis, jis... Eso me va a ayudar mucho a no recaer, porque si se me ocurriese me iba a comer todas las sonrisitas con patatas fritas.

Brujilla dijo...

Desde lueego...falto unos días y vaya panorama que me encuentro en el blog. Impresentables que enterráis vivos, la Tabi cambiándose de nombre cada dos por tres, el Berto...que no se si está poseido o exorcizando al impresentable, al Auri ¡que nos lo han violao¡ Joer, que no me extraña que Coco se halla pegao 4 caladas, pa todo tenía la moza.

En cuanto al tema de la entrada, no creo que sea procedente publicarlo a bombo y platillo...que la gente es mu mala y están esperando a que caigas para restregarte la consabida frasecita: "Ya sabía yo que TU no aguantarías", así que yo, que soy más mala que el resto, no lo he ido contando por lo que pudiera ocurrir.
¿Sabéis lo que más me jode? que de los más allegados hay quien aún no se ha dado cuenta de que no fumo, precisamente los que más han incordidado siempre con el tema.
Lanya, comprendo perfectamente que sientas vergüenza pero lo tuyo no es nada comparado a lo mío...yo también volví a fumar pero no sólo me escondía en el trabajo...era con los amigos, con la familia, pa que veas...de esto hace más de 5 años y a mi padre le confesé que había vuelto a fumar hace 2 meses y siete días, es decir...una semana antes de volvereme a quitar de fumar.

Pues nada, churris, cuidaos mucho, comed bien, disfrutad del veranito pero sobre todo, sobre todo...no fuméis. Os veo a la vuelta ya que pasado mañana me piro de vacaciones.
Que sí, que mañana entro y os leo que me divierto mucho con vosotros.
Besossssss