domingo, 14 de diciembre de 2008

Angustia navideña?

Buenos dias de domingo!!!!

Mucho me ha costado decidirme a escribir en el bloc. Leer os leo siempre que puedo y eso pasa muy a menudo. Llegó un momento en mi proceso de dejar de fumar que dejé de necesitar consejos y apoyo diarios de otros compañeros en mi situación.
Llevo ya más de 5 meses sin fumar (julio/diciembre). Se consigue, claro que sí. Eso equivale a 2700 cigarrillos no fumados i 427 euros ahorrados, respiro mejor, no ando acongojada por no tener un paquete en el bolso, el cafè sabe buenísimo y no huelo a caimán, huelo siempre a vainilla..... Pero llevo unos dias que sin más ni más me asalta el deseo/recuerdo de quemarme la tráquea com el paso del humo de un cigarrillo rubio y recuerdo el momento en que se me quedaba líquido el cerebreo de tantas horas sin aspirar nicotina y me viene el deseo de tener el colocón que todos conocéis.
Digo yo si no será la angustia de las fiestas que estan a punto de empezar, y que no me apetecen en absoluto. Intentaré esquivarlas tanto cómo pueda. La angustia de acabar otro año que no me ha ofrecido todo lo que esperava de él..... Y si empiezo con el tema de la economia doméstica.... ya es para el suicidio rápido sin pasar por la nicotina.
Mi terapeuta me diria que tengo que darle la vuelta a este planteamiento negativo que no me es provechoso en ningún sentido. He estado dándole vueltas y vueltas, però lo único que se me ocurre es invertir los 427 euros en una bicicleta nueva y un candado (en mi pueblo las bicicletas no ruedan, vuelan!!!!). Salir a correr cada dia un buen rato y olvidarme de tanta tonteria que seguro sólo està causada por la inactividad del cuerpo.
Mucha ayuda no pido.... Yo misma me doy las soluciones. Pero creeis que apetecerme fumar de esta forma rabiosa, a los cinco meses de dejarlo, es normal?

26 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente normal, cada fase tiene sus amenazas. A mí a partir del tercer o cuarto mes me costó no fumar porque ya no tenía el empuje y la decisión del principio y encima ya me había acostumbrado a las ventajas. No fumé y se me pasó la cosa, como se me había pasado el mono, la nostalgia y todas esas incomodidades.
Si te apetece una bicicleta, compratela, y si te apetece ir a un spa vete. No solo es una cuestión de dinero, sólo se vive una vez y para eso has dejado de fumar, para que sea lo más y lo mejor posible. Mímate.

La Taberna Fantasma dijo...

Genial que hayas escrito, Ella, para eso está este lugar, para cuando lo necesites. Sin obligaciones y sin tener que fichar (salvo Gabi, que está en observación).

A mí también me pasó esto que cuentas y creo que a todos los que llevamos más de cinco meses. Creo que ocurre por lo que te dice Berto, hemos perdido la energía del principio, nos relajamos un poco, pensamos que ya está superado el asunto... pero la memoria del tabaco es mucho más persistente que cinco meses. No te agobies, no significa que tu proceso de deshabituación esté flaqueando, es sólo una fase más.

Y si estás haciendo repaso de todas las frustraciones que te ha deparado el año... para qué queremos más. Dale la vuelta al pensamiento pero no sólo para no sentir mono, sino porque no es bueno concluir fases vitales -aunque sea simplemente un fin de año- con el sabor amargo de lo no conseguido.

A mí tampoco me ha ido bien este año, diría incluso que ha sido aciago, pero este es el año en que he dejado de fumar y así pienso evaluarlo, como el principio de una vida mucho más libre. Y el resto, en palabras de Sabina: 'una mala gripe que había que pasar'.

Cuando me ronda el mono es porque siento frustración o ansiedad, así que el remedio para que no venga es combatirlas de raíz. Lo que dice Berto, complácete, cómprate una bici si hacer ejercicio es lo que quieres y necesitas, y si es otra cosa, pues adelante con ella.

El mono nos rondará más o menos y por temporadas durante mucho tiempo, así son las adicciones. Yo creo que el objetivo no es que esto no suceda, sino que sepamos lidiar esos momentos con un buen pase torero, y cada vez vamos sabiendo más sobre cómo hacerlo, por viejos y por diablos... ;D

Gabriela dijo...

Hola y bienvenida. No voy a agregar mucho porque acá ya Berto y LTF siempre tan atinados, dieron en el clavo, pero además, como ves estoy en observación por parte de la Administradora.
Unas cositas más voy a decir, que es que este rollo de las fiestas no sólo despierta ganas de fumar, sino toda clase de malestares, de actitudes poquito autodestructivas, y de excesos. Es como si todo convergiera para que uno se ponga medio meditabundo, se sienta un poquito fracasado, para que entonces con la autoestima ahí apenitas a ras del suelo participe, de mala gana, de un brindis con compañeros de trabajo de la pareja que ni conoce uno, se tome unas champañas de más y tenga ganas de fumar, acumule ira por reprimirse, y que luego par descomprimir salga y se meta a comprar compulsivamente y sin onda regalos pa todo el mundo que pagará en cómodas cuotas con la tarjeta hasta diciembre que viene...no sé. Hice esta cadena, exagerada, claro y excesiva también, por hacerla. Porque no es lo que a mí me sucede, pero veo que sucede a mi alrededor y mucho. En realidad a mí las fiestas me resbalan (salvo por la carita de los pibes en el momento en que abren sus regalos con esa alegría única). Me resbalan y participo lo mínimo para no doler a otros que sí creen, pero como espectadora, más bien. Con respecto al fin de año, cuando me sorprendo queriendo hacer el tal balance me digo a mi misma que vamos, que esperemos a enero que estaremos de vacaciones y más relajadas, porque a esta altura del año, y con la presión que recibimos no se puede pensar claramente en casi nada y seguramente no solo terminaría fumando un eucaliptus, sino también bebiendo abrazada a un cigarrillo. Ningún balance, no ahora. Y vieras cómo en enero (recostada en algún río o playa porque acá es verano) todos los balances me dan casi positivos. Lo que quiero decir es que el diseño de toda esta temporadita entre acá y Reyes está tan perversamente diseñada que sirve de mala manera a que la adicción y sus mil mecanismos nos justifiquen el deseo de fumar. Y bueno, mientras no fumemos, todo bien. Saquemos a relucir todas las armas que tenemos.
Te envidio mucho. Ojalá a mí me diera por andar en bicicleta y quemar energías malas y calorías. A mi me da por comprarme helado de limón y tomar sol en la reposera del patio, o en la cama viendo pelis. Qué envidia, realmente. ¿Me pasás el e mail del terapeuta que te mandó a comprar la bici?
Tabi, ya, sacame del freeze que acá hay otros varios que ni “hola perro” y ni un sermoncito para ellos. ¿No? ¿O es que se les permite porque son varones? Me extraña de vos, muchacha...

Sopar literari dijo...

En el fondo, Berto, me alegro que estos apretujones sean normales en estas circunstancias. He aguantado algún pequeño tirón esporádico de vez en cuando; pero estas dos semanas se llevan la palma!! Y no me esperava que fuera tan intenso... Mañana decido cómo lo encaro...

Pero tienes razón Tabern en que si algo he conseguido este año es dejar de fumar (despues de, más o menos, 25 años de experta en ello). Es un gran dato. Rectifico es el mejor dato para evaluar resultados anuales ...

Tengo que aprender a ser más benévola conmigo misma.

Anónimo dijo...

Si, desde luego dejar de fumar es un poco pesado, cuando ya piensas que está solucionado ahí está otra vez la chicharra esa sonando. Quierofumarquierofumarquierofumar.
Mierda pal tabaco, total si volvieras a fumar tendrías que volver a dejarlo y otra vez estarías en este punto. Pues por lo menos padecer tensiones nuevas. ¿No?

La Lola dijo...

Hola Ella, soy gazmira, te vi alguna vez por el quito. Mira yo llevo un año y medio sin fumar y mono no tengo hace bastante, pero si te puedo decir que en algunas ocasiones que veo a la gente fumando cuando estoy por ahí de marcha me da un toquito y me dice, um que rico...cigarrito, mira que bien se lo pasan estos que estan fumando...
Pero es un segundo y lo que hay que intentar es que no pase de ahí y desde luego hacer oidos sordos, de todas formas cada vez pasa menos.
Tu ánimo y pa,lante...¡que se puede conseguir!
Un beso

josman dijo...

Creo que es una cuestión de ciclos y que se trata de estar preparados, porque normalmente, si somos capaces de dejarlos pasar a traves nuestro y aceptamos que es parte del proceso, no tienen porque ser especialmente molestos; lo malo seria confundir esos repentinos deseos de un cigarro con que no lo estamos consiguiendo, pués eso solo lo podriamos decir si SIEMPRE Y A TODAS HORAS tuvieramos el deseo de un cigarro...vamos lo que nos ocurria cuando eramos fumadores activos.

En resumen, creo que lo mejor es no darle demasiadas vueltas, porque, en todo caso, y siendo sinceros, hemos de convenir en que no tiene nada que ver el acto de voluntad preciso para decir NO ahora comparado con los primeros momentos de abatinemcia, asi que a pasar los escasos malos ratos y a disfrutar de los buenos..que nos lo merecemos :)

Sopar literari dijo...

Si,si,... pequeños tirones los tengo y los aguanto muy bien. Lo que no entiendo es cómo me funciona el cuerpo o sea que estímulos externos són los que encienden el mecanismo peligroso del "mono".
O por el contrario no es necesario ningún estímulo y solo es mi cerebro que me putea!!!

A saber!!! Mañana le daré trabajo a mi terapeuta.

P.D. Os deseo una buenas y felices fiestas y un año lleno de 2 amores cómo mínimo 0 ansiedades 0 monos y 9 alegrias (muy grandes, claro está) para todo el año que viene

La Taberna Fantasma dijo...

Gabi, no protestes, que tu seguro cubre lunas rotas. Por cierto, que al admin es Auriga, no recordáis que le engañé...? (dónde andas, Auri?)

Un pensamiento a tener en cuenta en estas navidades: ¿Recordáis la cantidad de veces que hemos dicho que lo dejábamos el día uno de enero? ¿Y todos esos proyectos para el año siguiente que poníamos en una lista mental encabezada por 'dejar de fumar'? Pues este año ya no tenemos que hacerlo.
¡Van a ser unas fiestas coxonudas!

Y a Ella además se le va a poner el culo duro con la bici. Si aquí quien se queja es porque no tiene na que hacer... jajajj...

Anónimo dijo...

Y si quieres mantener tradiciones dices que el uno de enero vuelves a fumar y el uno de enero tampoco cumples tu palabra. Basta con decir que el día uno es un dia malo porque anda uno revuelto con tanto trasnoche y mejor no añadir nicotina y los consiguientes mareos, mejor el dos o casi mejor a primeros de febrero. Total si llevas sin fumar la de Dios no te va a pasar nada por aplazarlo un poco.

Alf dijo...

Buenos dias joder os dejo dos dias y os desmadrais dos entradas mas con mogollon de comentarios jejejeje bueno contaros que no he escrito por que he estado muy liado trabajando y sin tener tiempo de nada y para nadie es final de año y esto es asi siempre.

Por otro lado sigo sin fumar el finde semana sali de copas y de bares de cena y esas cosas y la verdad es que lo pase un poco mal pero bueno na con un poco de convencimiento me dije que no y fue que no asi que aqui estoy afrontando el dia 16 sin fumeteo

Bueno que un abrazo a todas espero que estas nieves y las lluvias hagan que los jardines esten todo lo regados que se merecen y para vosotros un apreton de manos y un futbolin cuidaros

Anónimo dijo...

¿...Y por qué lo pasaste mal, Alf? ¿Cuáles fueron tus pensamientos para sentirte mal?

Seguro que no fueron todos esos tan bonitos que nos decimos aquí sobre lo bien que respiramos y la libertad que tenemos y patatín patatero... No. Seguro que no fueron esos.

Tuviste que decir no a esos pensamientos que te incitaban a fumar, y eso es frustrarse... y con una copita de más, enseguida nos convencemos para quitarnos las frustraciones.

Dejar de fumar no es fácil, pero soy el responsable de ponérmelo más difícil, y entonces no puedo ir por ahí con lamentaciones.

Con facilidad soy capaz de decir "hoy no salgo porque tengo gripe y si salgo me voy a sentir mal". Ahí no pineso "aunque tenga gripe saldré porque quiero seguir haciendo lo mismo de siempre"

Con el tabaco, no. Con el tabaco pensamos "si salgo me voy a sentir mal, pero da igual porque yo quiero seguir haciendo lo mismo de siempre"

En ambos casos no salir es un hecho temporal, pero la última actitud es totalmente adictiva, y las actitudes adictivas me llevan a caer en la adicción.

..y lo más probable es que no caeré el mismo sábado en medio de la fiesta, no, no, ahí no, porque "yo controlo y sé estar sin fumar sin ningún problema y mira lo bien que ahora respiro..."; sino el lunes cuando al ver una rayadurita en el coche la tensión latente me provoque unas ganas incotroladas de diezmar la población adyacente y me convenza que para evitar tamaño desafuero lo mejor será calmarme fumándome un cigarrito.

Así lo he hecho siempre y así seguiré haciendolo a no ser que rompa ese círculo de mi actitud adictiva.

Alf dijo...

lo pase mal no por pensamientos o por algo asi l opase mal por que en el ambiente habia mucho humo de tabaco y al respirarlo mi cuerpo empezo a dar señales de ansiedad a recordar ese olor etc... pero como te digo controle las ganas no se ya si hice bien o mal por que como no hago na bien pues ya no se jajajaa la verdad es que eso fue el Sabado y hoy Martes sigo sin fumar a por cierto el rallon en el coche ya lo tengo del Lunes jejeje y no fume va a hacer falta algo mas que un rayajo en el coche jejejej

Anónimo dijo...

Está muy bien, Alf, eso de echarle la culpa al cuerpo.

Mundo, demonio y carne son los enemigos del alma. Y tú, sí, túuuu, entregaste tu alma a sus enemigos, y entonces el cuel-po empezó a notar las ansiedades furiosas del vicio del tabaco e intentó drogarse aspirando jadeante el humo con el que el mundo lo envolvía.

Pero tu aaaaalma, consciente de su negligencia recuperó su entereza y dijo: no, no y mil veces no; antes morir que fumar. Y aunque inerme ante los ataques del cuerpo ignominioso, resistió impertérrita hasta conseguir su salvación cuando aquél se rindio al cansancio de la noche.

¡Plas, plas, plas! ¡bravoooo!

Dicho de otro modo, que tuviste unas ganas de fumar que te cagabas pataspabajo.

Y las ganas de fumar las provoca la mente...

Alf dijo...

como iba yo a estar en lo cierto es imposible

Anónimo dijo...

Claro que estás en lo cierto, pero es una especie de certidumbre incierta que no nos permite ver con claridad en las zonas oscuras de nuestra mente incierta.

O algo así, supongo...

Gabriela dijo...

¡Auriga!Qué gusto verte.

Vengo del décimo noveno brindis de la semana para despedir el año, y ya no sólo que no fumar, sino que demás rechazar los bocaditos, las champañas, las cocacolas, las patas de ternera asada, oh, es demasiado. Es demasiado. Lo único a favor es que como aquí es verano y en menos de un mes estaré en la playa, tengo el incentivo de que todos mis amigos allá vean que sigo sin fumar, y que además entré lo más bien en mi traje de baño. ¿Ves Alf? ¿Todo lo que falta por reprimri?...Tendríamos que según los consejos de Auriga, suspender todas estas celebraciones de oficina...
Bien Alf, como sea que sea, lo cierto es que va por el día 16 sin fumar. De todos modos, está bien igual ir pensando en todas estas cosas que plantea Auri, para que no te agarre nunca desprevenido esa inquietud, esa revueltita adentro. Y menos si estás tomando champix, y un día tengas que dejarlo...
¿Y Fénix? ¿Y Celejóta? ¿Y la chancleta correctiva?
Fénix...No habrás fumado, ¿verdad?
Berto, no se si te has fijado, pero la niña LTF está retobada y no nos hace la tarea ¿Y para eso la mandamos a los mejores colegios, y gastamos fortunas ene las universidades? ¡Queremos los porecentajes discrimanados y comparativos de cada peseta de cada cigarrilo en ambas orillas, jovencita! A ver cuántos pares son dos botines.

Anónimo dijo...

Alf dijo...: y al respirarlo mi cuerpo empezo a dar señales de ansiedad a recordar ese olor etc... pero como te digo controle las ganas no se ya si hice bien o mal

Pues sí, guapo, sí, hiciste muy bien controlándote. Que el cuerpo se os descontrola por nada y una no sabe ya qué ponerse para no sentirse acosada.

Anónimo dijo...

Pues yo ayer pasé un día de esos en los que se te aparece la Montiel en el último cuplé cantando fumar es un placer.
Y después de ocho meses casi se me va la mano a una alegre cajetilla en la mesa con un pensamiento de "a tomar por culo, ya volveré a dejarlo como lo he dejado esta vez"
Y la verdad es que no sé porque no fumé, aún no sé que me hizo decir no. Hoy tengo la sensación de que voy a volver a fumar y me temo que esta actitud no es ni mas ni menos que me estoy preparando para fumar. Creo que el adicto que tengo dentro sabe que ahora me sentiría disculpado para volver.

Anónimo dijo...

Sí, Berto, sí, te estás preparando para fumar. Incluso el dejarlo escrito aquí es una preparación. Es un "ya lo avisé" para evitar el sentimiento de culpabilidad por defraudar a los "amigos".

Con el "ya volveré a dejarlo como lo he dejado esta vez" intentamos convencernos de que no ha sido nada difícil conseguirlo, y por tanto puedo repetirlo cuando quiera. Sabes que no es cierto. Dejar de fumar no es fácil ni aun sabiendo cómo.

También yo he mirado estos días alguna cajetilla con cierta ilusión. De momento me defiendo diciéndome: "no seas impulsivo. Hoy no toca. Tienes toda la vida por delante para recaer"

Anónimo dijo...

Berto, repítete once veces, once, cada ocho horas lo siguiente:
Pero mi aaaaalma, consciente de su negligencia recupera su entereza y dice: no, no y mil veces no; antes morir que fumar. Y aunque inerme ante los ataques del cuerpo ignominioso, resistirá impertérrita hasta conseguir su salvación cuando aquél se rinda al cansancio de la noche.

Seguidamente das once vueltas a la mesa del salón haciendo el indio y a continuación cantas el "alabaré, alabaré.." con ritmo de bolero otras once veces y a voz en grito.

A los de urgencias les dices que ha sido un lapsus emocional. A las vecinas, para calmarlas, prepárales una tila bien calentita, bien calentita.

Anónimo dijo...

Muchas gracias Auriga, he hecho todo lo que me has dicho y ha funcionado. A las vecinas les encantó venir a tomar tila a mi casa. Ahora estoy muy cansado porque han sido once esfuerzos seguidos y ya se sabe que a estas edades ya no con viagra.

Gabriela dijo...

Berto, no fumes, Berto.
No sé qué decirte, salvo que no fumes.
Anoche rompí un cigarrillo que alguno de los amigos de alguno de mis hijos se dejó sobre la mesa del estar, porque lo ví, y supe que era el que me iba a poder.
No fumes, Berto, a mi no me importa que me decepciones con aviso o sin él. Me importa que no fumes, Berto. Abrazo.

La Taberna Fantasma dijo...

Berto, iba a traerte unas animadoras con pompones, pero mira, no. Fuma si quieres.

Pero sólo si realmente quieres, no si se te pasa por la cabeza.

A ver, cada uno con sus deseos.

Anónimo dijo...

Gracias compañeros: hoy no fumo, mañana ya veremos.

La Taberna Fantasma dijo...

Ahí le has dao...