
miércoles, 29 de octubre de 2008
Es el Estado el que mata. Podemos seguir fumando.

lunes, 27 de octubre de 2008
Mi primer año sin fumar

Hemos visto que, una vez pasados los primeros meses de tirones físicos y en los que poco a poco se han ido desmontando las asociaciones al tabaco más habituales, viene una época de especial peligro, de calma chicha, una época en la que se nos olvidan los motivos por los que quisimos dejar de fumar porque ya han desaparecido esos molestos efectos del fumeque. Nos encantaría estar así de bien y además fumar pero, queridxs míxs, el tabaco y el bienestar son como las dos caras de una misma moneda, que no las puedes ver nunca a la vez. Así que hay que elegir, porque si eliges volver a fumar, eliges volver a estar hechx un guiñapo… Y aunque sólo sea por lo que cuesta, que entre las histerias, los quilos de más, las depresiones y los latigazos que se da una, se te quitan las ganas de hacerlo más veces.
Os juro que en este momento no me conozco. Por un lado porque jamás confié en mí misma lo suficiente para apostar nada a que iba a ser capaz de aguantar un año, así que en este momento me doy una gran sorpresa y no me parezco yo misma. Y por otro, porque peso tropecientos quilos más que hace justo un año, y son muchos como para reconocerse tan fácilmente en el espejo. Me gustaría decir que ha sido más fácil de lo que parece pero no, no lo ha sido, a mí me ha costao un huevo de pato y aún no he terminado de evaluar las pérdidas. ¿Otras personas lo dejan fácilmente y sin tantas parafernalias? Pues eso parece, pero esas son otras personas. Yo me siento como si volviera de un año de internamiento en una comunidad terapéutica. Gracias a todxs lxs que me habéis echado un cable en esta ruta, pues a todxs os debo algo importante. Ya sea un guantazo a tiempo, unas risas o una palmadita, el hecho es que parecen estar surtiendo efecto. Está claro que, como todo lo fundamental en la vida, dejar de fumar se lleva mucho mejor en colectivo.
sábado, 25 de octubre de 2008
PREPARATIVOS
miércoles, 22 de octubre de 2008
PRIMER MES, PRIMERA BATALLA GANADA
martes, 21 de octubre de 2008
Vivencias de un fumador que no fuma
Sigo sin probar calada, he soportado estoicamente toda clase de circunstancias que en mi mente aún enferma por los efectos de la adicción podrian ser una fácil excusa para la recaida, he aguantado bastante bien en parte gracias a las experiencias y consejos expuestos en los foros y blog. Soy de los que piensan que no hay que contemplar la posibilidad de recaida, de suceder es un gran fracaso y como el amigo Auriga pienso que nada de mimos ni palabras como "esta experiencia te hará duro para afrontar la próxima", deberiamos auto-prohibirnos expresar frases como esta que mi entender invitan a la recaida, si recaes malo y chancletazo al canto. Esta manera de pensar y el implicarme en la comunidad virtual a la que pertenecemos han sido mis principales ayudas.
En estos momentos cuando ya hace casi siete meses he de confesar que ultimamente lo estoy pasando bastante mal a ratos, en aquel foro hubiera puesto un seis o un siete en el formulario sobre ganas de fumar, será por algo cíclico o por algún otro motivo que a menudo pienso en el cigarrillo cuando parecía que ya lo tenía bastante superado; en principio las grandes tentaciones son casi siempre en mi puesto de trabajo donde por ley no debería pero que es donde más he fumado en esta vida (sin molestar ya que tengo mi propia oficina con suficiente ventilación; En contrapartida cuando salgo a cenar o a tomar una copitas no tengo necesidad, muchas veces ni tan siquiera pienso en el tabaco y si lo hago es para pensar en lo asqueroso que sabría una caladita. Físicamente sigo sintiendo en estos malos momentos cierto cosquilleo en mis plumones que parece ser están bastante bien después de mas de veinte años de castigo por mi mal hábito, no he tenido ningún tipo de síntoma, no he tosido desde el primer día en que lo dejé, no salgo a correr aunque no dudo en dejar el coche en el garaje para caminar ese kilómetro y pico que recorro de cuatro o seis veces cada día y no me canso como sucedía antes. Engordé un poquito pero nada preocupante, lo de recuperar sabores y olores no lo he notado suena a tópico, paso orgulloso frente al estanco pero sin dar saltos de alegría, en el fondo no soy más feliz que antes si no que el ser un fumador que no fuma es una condición como por ejemplo la de tener que trabajar este día que preferiría quedarme en casa, "que remedio".
Como habéis podido ver si es que alguien ha captado lo que yo quería expresar -insisto en que las letras no son mi fuerte por lo que si no habéis entendido nada es lo normal- empiezo a tener claro que esto va para largo y que lo que conviene es aprender a convivir con esta situación que por otra parte imagino no será para todos igual y por supuesto valorar el lado positivo en su justa medida que no es poco; en estos momentos mis "ejercicios espirituales" consisten en cuando me entran ganas de fumar por ejemplo en recordar aquella ocasión reciente en la que visité al "otorrino" y vi con pena aquellas personas sin voz y a la vez alivio de pensar que tengo bastantes menos números en esta lotería desde que no fumo.
Bueno, ya sabeis que sigo con vosotros y sin malos humos, no se si podré participar habitualmente, lo veo dificil pero espero en siete meses mas poder seguir contando las pequeñas tonterias del fumador que no fuma en este blog.
Fumarse

domingo, 19 de octubre de 2008
El mayor enemigo: Nosotrxs mismxs y nuestro subconsciente

Todos hemos escuchado la gran cantidad de perjuicios en la salud que produce el tabaco. Sin embargo, las personas desarrollan una fuerte relación con sus adicciones y crean respuestas emocionales de todo tipo. Pueden odiar su adicción con pasión y luchar contra ella y a la vez experimentarla como algo que les ha acompañado durante mucho tiempo. Se utiliza la adicción para eludir situaciones, procurarse otros beneficios, se acostumbra a ello y hasta cierto punto se llega a querer esa adicción. Aparecen emociones positivas como gratitud, lealtad, tranquilidad, paz que tienen un papel muy importante.
Los fumadores están acostumbrados a escuchar cosas terribles sobre la mala salud que produce el tabaco. Perjuicios que fumadores o no, conocen de sobra. Racionalmente el tabaco es malo. Pero emocionalmente se está ligado a él y se ha a creado un hábito de fumar. Estos tres puntos, razón, emoción y hábito deben estar en consonancia para poder conseguir el propósito de dejar de fumar.
Identificar motivaciones y beneficios de fumar: Todos dicen que fumar es malo, pero sin embargo nos aporta beneficios a los que nos aferramos para no dejar de fumar. Estos beneficios, en su mayoría son creados por nosotros, debemos detectarlos, analizarlos para saber con que refuerzos y resistencias nos enfrentamos y trabajarlos.
Los miedos y creencias: Impiden dejar de fumar. Bien porque en su momento de inicio fueron importantes para mantener el hábito o bien porque aparecen ante la idea de dejar de fumar: engordaré.. fumar me quita la ansiedad.. creo que no podré dejar de fumar.. tendré mono.. no podré dejar de disfrutar el cigarrillo de después de comer etc.. son miedos y creencias que aparecen ante un futuro sin adicción.
El hábito: Muchos de los cigarrillos que se fuman a lo largo del día no se disfrutan, no se sabe por qué se encienden, e incluso algunos quedan encendidos y consumidos en el cenicero sin reparar en que están allí. Se crean muchos hábitos asociados a fumar, se repite de forma automática el acto de encender un cigarrillo cada vez que se realizan determinadas actividades. Las adicciones deben trabajarse como un comportamiento repetitivo, fuera del control.
Tomado del Blog Dejar de Fumar
jueves, 16 de octubre de 2008
¿Dejar de fumar puede afectar a la salud mental de los que nos rodean?
Yo no sé si una conversación sobre la realidad de tu matrimonio cuando llevas dos días sin fumar será una gran idea. Si no te divorcias lo más seguro es que vuelvas al feo vicio, porque síndrome de abstinencia tiene su momentazo entre las 48 y 72 horas, creo recordar. Y venga... reconozcamos todos una cosa, dejar de fumar NO endulza el carácter y durante los primeros dos meses menos.
Mi pareja y yo, que dejamos de fumar casi a la vez. Tuvimos un verano malísimo, en el que concluí que dejar de fumar es bueno para la salud pero terriblemente nocivo para la pareja. Y no es que los problemas los cause el tabaco es que uno tiene una voluntad menos negociadora y permisiva y eso para mantener una pareja es más importante, me atrevo a decir, más que el sexo. Y si encima del mono tengo que oír a mi marido decirme dos tonterías el grito se lo doy a mi marido que el mono no tiene oídos.
Alhuerto comentaba que le resultaba familiar esto de los divorcios durante el proceso de independencia del tabaco.
Por otra parte, si la forma de superar una adicción es reconocer que se trata de una enfermedad, porqué no podemos entender que otros fumadores/enfermos tengan actitudes poco alentadoras hacia nuestro proceso.
Cuando yo dejé de beber una persona muy cercana y querida, que presuntamente también tiene problemas con el alcohol, me hizo algún comentario desesperanzador, alguno lleno de nostalgia de nuestros tiempos de borrachos y alguno agrio porque sin decir nada yo le estaba enfrentando a su propio problema.
Esta persona no es ni mala ni malvada, ni me quiere mal, esta persona tiene un problema severo con esta sustancia y en todo lo que toca con eso no se puede entender si no es tomando el punto de vista de un adicto.
Mi pareja dejó de fumar tres o cuatro días después de que lo hice yo. Lo decidió libremente, pero yo le dije que la cosa no era para tanto y que había descubierto unos trucos para sufrirlo menos. Con todos mis amigos fumadores he mantenido una actitud permisiva y optimista porque estoy seguro de que esta es la mejor forma de que dejen de fumar y esta es la mejor forma de que yo deje de tener que ir a bares para fumadores, preocuparme de si tengo dinero suelto para meter en la máquina o tener que quedarme a la puerta del teatro hasta el último momento a que se acaben el cigarrillo, cosas con las que evidentemente puedo convivir pero preferiría no hacerlo.
Quizá algunos de nosotros, entre los que me incluyo, hacemos de nuestra rehabilitación el centro del universo, y proyectamos sobre los demás nuestras necesidades pensando que tenemos una poderosa razón para ser monotemáticos, nerviosos y ásperos.
En algún momento pensé en decirle a mi pareja que le prefería cuando fumaba, no lo hice porque sabría que él me diría lo mismo a mí y que seguramente entonces volveríamos al tabaco juntos de la mano.
¿Somos igual de comprensivos con los otros fumadores como lo somos con nosotros mismos?
miércoles, 15 de octubre de 2008
Culebrón
lunes, 13 de octubre de 2008
¿Y AHORA QUIEN SOY?
Lo cierto también es que como la crianza, el sostenerse parece no terminar nunca. Como una zanahoria en la nariz que va mutando, allá vamos. Y dejamos la botellita de agua que pareció parte de nuestras manos, y dejamos de caminar como locos, y dejamos de dejar ver a los amigos, y dejamos de temer, y dejamos de comer, y reemplazamos por otras maneras, pero como sabemos, siempre alertas. Siempre en vigilia. Incluso, en lo personal, también voy sintiendo a veces hasta un síndrome del nido vacío, cuando hay días que me cuesta menos o me ocupo mucho de otras cosas y queda espacio, creo que hasta me deprime un poquito ya no estar en la euforia permanente de ser una dejadora.
Yo no se si es la adicción solamente. Creo que para algunos de nosotros el hecho cultural del ser fumador tiene un peso que hace al cigarrillo parte constitutiva de nuestra personalidad. Las gentes de izquierdas fumaban, Los intelectuales fumaban. Las mujeres sexy fumaban. Las mujeres independientes, las divorciadas, fumaban. Los artistas fumaban. Los tíos piolas fumaban. Los que resistían en todas partes, fumaban. Ser fumador en un tiempo no era sólo ser un boludo coptado por las publicidades de marlboro.
Ser fumador, al menos en mi lugar en el mundo, también tenía que ver con una manera de ser y de resistir. Y no quiero decir con esto, no soy tan boba, que la ultra derecha no fuma. Pero hay claramente para mí, y para muchos como yo, una asociación importante entre la adicción al tabaco y muchas elecciones ideológicas, éticas y de valores, del mismo modo que las hay a los momentos de placer o de estrés o lo que ya sabemos.
Auriga, por favor, no empieces a gritarme que no voy a fumar para parecerme un poquito a Janis Joplin, ya no. Ni a Frida. Pero hace tiempo quería escribir sobre esto, porque no lo hace positivo. Ni siquiera lo hace mejor o peor. Pero en mi caso al menos, el querer parecerme a mi tía Dora que fumaba unos via appia mentolados, que era la única maestra rural en 400 km a la redonda y se echaba un pueblo al hombro, por ejemplo, tuvo que ver. Y les parecerá mentira, pero a mis 43, todavía asocio bastante su bravura para poder con todo, con aquel cigarrillo que se fumaba en una tranquera, a la tardecita y paradójicamente ¡a escondidas de mi abuela que decía que las que fuman son todas putas!
Anoche hablaba con una amiga y con uno de mis hijos, y ellos no podían creer que hasta hace quince años, acá se fumaba en los hospitales, encima de los bebés, en los colectivos. Les da muchísima risa cuando lo comentamos. Tampoco pueden creerme porque no lo recuerdan, que hace veinte años nos pasábamos el día entero en la playa y sin filtro solar, y que no se hacía cáncer de piel por eso. Lo que quiero decir es que la evolución del mundo, los cambios de paradigmas y las imágenes que reemplazan a imágenes no siempre son el correlato de que algo bueno nos está pasando. Y no estoy dudando de lo bueno que es dejar de meterse humo en la garganta y fuego en los labios. Estoy diciéndome a misma y quizás especialmente a una que yo conozco, que aunque a veces no parezca, es definitivamente bueno no fumar, que no traicionamos a nada ni a nadie por eso, y que sí, Taberna. Volvemos a ser las mismas.
Solo que nos costará un poco, en el estante de la identidad, acomodar el casillero "y también quisiera fumar como...."
Cómo destrozar tu look con Nicoclean
María, 20 años: "Con Nicoclean mantengo mis ojeras bien marcadas y oscuras"
¿Harta de tener tan buen aspecto?
Prueba Nicoclean, la nueva crema facial enriquecida con extractos de tabaco.
Sus microcápsulas penetran profundamente en tu epidermis liberando nicotina y otras toxinas.
De la mañana a la noche, tu piel tendrá un aspecto visiblemente más tenso y adquirirá un color más pálido, más fantasmal. Sin duda, darás miedo con sólo mirarte. Con Nicoclean, añadirás diez años a tu aspecto en menos de una semana.
Es un producto de Nicomarket
sábado, 11 de octubre de 2008
Contra las erecciones inoportunas: Nicocalm
Pues sí, amigxs. Después de minutos de investigación y tras arduas reflexiones al respecto que han colocado mi única neurona en el borde de la extenuación irreversible, creo haber encontrado la solución definitiva para todxs aquellxs que se sienten importunadxs por la desconcertante irrupción del deseo sexual en sus pacíficas vidas. Al módico precio de 99,99 € al mes Vd. puede vivir al fin libre de las tentaciones de la carne. ¿Lo sabrán en el Vaticano?
Por ello me decido a romper momentáneamente ese principio no escrito de este blog que prohíbe la publicidad y me atrevo a patrocinar este producto por el bien de todxs nosotrxs. El vídeo está en inglés pero si no pilláis da igual, se entiende cristalina y meridianamente.
¿Las erecciones inoportunas te fastidian la vida?
¿Te impiden dormir, te hacen perder la concentración, molestan a tu pareja?
¿Y estás harto de ese antiestético bulto en los pantalones?
Disponible en Nicomarket tienda online
jueves, 9 de octubre de 2008
Gatillazo mental. No importa, llevo un mes sin fumar!

Y bebimos y tapeamos y tonteamos y seguimos bebiendo y ella fumaba y yo habría dado uno de mis huevos porque un cigarro no supusiera una recaída. Pero chic@s, es que yo estaba excitadísimo y algo borracho y teníamos feeling y... entonces ella me pone el paquete delante de la cara y me dice "venga hombre, no sufras, coge uno que por uno no pasa nada"... Me quedé pasmado del todo. No, no, le dije yo, claro que pasa. Y ella insistía...!! Que si de algo hay que morirse, que se cagaba en la moda de lo políticamente correcto, y no sé cuántas tonterías más que desgranó una por una como si necesitara convencerme de que no debía dejar de fumar. En cosa de diez minutos se me pasó el pedo, me pareció algo bizca, culibaja y contrahecha y, sobre todo, tonta del todo (y con mala leche, joder!). Así que al ratito me despedí amablemente y me fui a mi casa. Como os lo cuento.
No sé si será verdad eso que decís de que dejar de fumar mejora el temita, pero a mí me tiene de gatillazo mental total.
sábado, 4 de octubre de 2008
El placer de no fumar nunca más (para Gabriela)
Pero lo estamos haciendo bien, Gabi, estamos aprendiendo. Estamos aprendiendo cosas nuevas de nosotras mismas y nuestros modos de ser, de estar, de vivir. Reafirmamos cosas que ya sabíamos, como que los logros importantes se consiguen mejor con amigos y que la magia existe y nos pertenece, la magia de construir y de hacer de los no-lugares una salita confortable donde encontrarnos y compartir un mate. Estamos convirtiendo nuestra peor y nicotínica cara en una oportunidad para crecer y solventar nuestras cosillas pendientes, ser más completas y mejor gente (y tener mejor cutis, mejor aliento, los dientes más blancos y el culo más duro, que también es importante, jajaja...).
Sólo siento que el final del camino no esté muy definido, que no vayamos a entrar en Roma como ayer entraste tú en Córdoba, en loor de multitudes y rodeadas de musculosos y bronceados efebos... No oiremos toque de trompetas ni caminaremos por una alfombra roja entre flashes y autógrafos. Nadie nos nombrará por megafonía, no habrá aplausos en ningún anfiteatro, y Javier Bardem no nos entregará ningún premio ni nos invitará a cenar descaradamente, aunque esto último tal vez no deberíamos descartarlo...
No importa, Gabi, porque para entonces habremos aprendido a disfrutar los personales, cotidianos e íntimos placeres que nos brinda el hecho de no fumar nunca más. Gracias por el mate.
jueves, 2 de octubre de 2008
Componentes psicológicos de la adicción a la nicotina
Fuente: Universidad de Sevilla
Autor: Vellisco García, A. Serv. Neumología. CE. Dr. Fleming,
Hospital Virgen del Rocío. Sevilla.
miércoles, 1 de octubre de 2008
COMO? QUIEN? DONDE? POR QUE??
Volved a casa que todavía no tenéis la mayoría de edad, y me da miedo que os vayan a atracar y que luego con el berrinche, llegue la mafia del mono y os trinque otra vez.
Con lo que nos ha costado que nos encarrilemos todos por el buen camino, largo y duro pero bueno. Ainssss, que vamos, que se os hecha de menos, que esto está muy triste, hasta el canario ha dejado de cantar, snif snif, y a mi no me da tiempo a tenerlo todo tan organizadito, y limpito, que esta casa es muy grande chic@s.
Veis si es que a mi ya se me empieza a ir la pinza y to, volved a casaaaaaa, snif snif.
Por cierto bienvenidos a todos los que quieran entrar a tomar café, o lo que os apetezca, como si queréis quedaros para siempre, se os puede hacer un huequito. Y los que ya habéis entrado, estamos muy contentos de esos cortitos que nos hemos tomado juntos y que sigáis entrando que nos ha alegrado mucho veros por aquí.
A todos aquellos que por h o por b estáis pasando unos malos momentos, que aguantéis, que sois unos campeones, y que no os dejéis engañar por esa mafia del mono. Qué levantéis el ánimo y a seguir para delante, que a mi me habéis dado una lección y me he dado cuenta de que yo también puedo conseguirlo.
POR TODOS NOSOTROS, LOS MEJORES. (Vamos que de aquí, nos vamos a las próximas olimpiadas)